Acabo de regresar de ASCEND 2025, la increíble conferencia organizada por los grupos de usuarios OATUG y OHUG, y todavía estoy procesando todo lo que viví — lleno de energía, inspiración y una profunda gratitud.
No fue simplemente otro evento más en la agenda. Fue un viaje completo de aprendizaje colaborativo, reencuentros con viejos amigos, nuevas conexiones, y una celebración de cuánto hemos avanzado — no solo en tecnología, sino también en lo personal.
La semana comenzó de la forma más inspiradora: con una visita al Kennedy Space Center, organizada por el programa Oracle ACE. Era mi primera vez allí, y estar en un lugar donde literalmente se construye el futuro — con NASA, SpaceX, Blue Origin y otros impulsando la próxima generación de la exploración espacial — fue absolutamente impactante.
Compartir ese momento con otros miembros del programa ACE lo hizo aún más especial. Se sintió como si estuviéramos lanzando nuestra propia semana de exploración: en innovación, ideas y conexiones humanas.
Ese mismo día, participé en una reunión del directorio junto a los líderes de OATUG y OHUG, donde reflexionamos sobre la estrategia, la visión y el futuro de nuestra comunidad de usuarios. Fue muy valioso alinear ideas en persona y ver la pasión y el compromiso que todos tienen por hacer crecer este ecosistema.

Cuando la conferencia comenzó oficialmente, la energía siguió creciendo. Tuve el honor de dar dos presentaciones y participar en dos paneles muy dinámicos — con audiencias increíbles, preguntas profundas y una energía que solo un evento presencial puede generar. Me recordó el valor de aprender en comunidad y lo importante que es intercambiar ideas más allá de las diapositivas.
Uno de los momentos más significativos, en lo personal, fue reencontrarme con un gran amigo con quien inicié mi camino en Oracle hace casi 20 años — y curiosamente, nuestro primer viaje de trabajo juntos también fue a Orlando. Así que ahí estábamos, casi dos décadas después, poniéndonos al día y celebrando ese momento tan simbólico.
También tuve el placer de ver a mi colega Heidi dar una presentación fantástica — siempre es un orgullo ver brillar al equipo y aportar valor a la comunidad. Entre sesiones, también dedicamos tiempo de calidad a conversar con clientes y potenciales clientes, explorando el futuro, nuevos desafíos, y cómo seguir generando impacto juntos.

Tuve la suerte de asistir a una de las Power Hours, donde escuchamos la poderosa historia de un sobreviviente del aterrizaje de emergencia en el río Hudson. Su mensaje fue una verdadera lección sobre liderazgo en crisis — cómo mantener la calma bajo presión, cómo priorizar lo esencial y cómo la perspectiva puede fortalecer la resiliencia. Es uno de esos momentos que se quedan contigo.
El martes, disfrutamos de una cena increíble organizada para los Oracle ACE — ¡gracias, Jennifer, por la invitación y por hacer que esta comunidad se sienta siempre como una familia! Esa misma noche, bailamos y celebramos juntos en el evento de agradecimiento — un momento de pura alegría en el que todos nos desconectamos un poco, conectamos como personas y simplemente nos divertimos.
Y por supuesto, ningún ASCEND está completo sin la tradición: nuestro partido anual de tenis con Santiago y Mohamed. ¡Este año incluso tuvimos fans! (aunque, seamos honestos, todos alentaban a Santiago). Es uno de esos pequeños rituales que, de alguna manera, capturan el espíritu de toda la semana — comunidad, competencia, risas y conexión.
Antes de que terminara la semana, también tuve el honor de entregar el reconocimiento al Star Speaker 2024 — un gesto pequeño pero significativo para celebrar a quienes hacen brillar nuestra comunidad con su voz y su contribución.
Y sí, siempre voy a atesorar nuestra foto oficial del directorio — una imagen que representa a un equipo, un momento y una misión que todos compartimos y en la que creemos.
ASCEND 2025 me recordó por qué amo lo que hago. Las personas. El aprendizaje. La risa. El propósito compartido. Volví lleno — de ideas, de gratitud, y con mucho impulso.
A todos los que conocí, reencontré, aprendí o bailé con ustedes — gracias. Hicieron de esta experiencia algo inolvidable.
Y si nunca has asistido a ASCEND, no te lo pierdas. No solo vas a aprender. Vas a crecer, vas a conectar. Y puede que regreses cambiado.
Nos vemos en ASCEND 2026. Hasta entonces, sigamos ascendiendo — juntos.
